miércoles, 30 de noviembre de 2022

XLVIII Semana Micológica (Clausura de actividades)


Se termina finalmente toda referencia a la Semana Micológica de León de este año con el cierre definitivo del “Concurso abierto al mayor ejemplar micológico o seta más grande dentro de su especie”.

Este tipo de certámenes ya se había celebrado con anterioridad, pero sin unas bases de participación específicas. Aparecía una Macrolepiota procera de 35 cm y llegaba posteriormente un Meripilus giganteus, de múltiples sombrerillos, pero de 1 metro el conjunto. Por eso este año se buscó más que el tamaño bruto, la proporción con setas de la misma especie.

 El caso es que, en una de las mesas expositivas llegaron a aparecer varias especies de gran tamaño. Se tomó como referencia el tamaño máximo de cada una de esas especies, que a nivel estrictamente leonés, figura en la local “Guía de Hongos de la Península Ibérica”

 
 

 

 

 
Todas las setas estaban casi al 100% del tamaño máximo según la Guía. Pero había una que alcanzaba un 95% mayor de ese tamaño. Con 19 cm. de diámetro, de coronó al TRICHOLOMA IMBRICATUM, que se llevará como premio el libro de “50 años de San Jorge en León” y un par de abrazos. El accésit fue a parar a un sombrero de ARMILLARIA MELLEA de 18 cm. (5% por encima del máximo) que ganará el mismo libro, pero resignándose a un solo un abrazo.

Como suele ocurrir, desconocemos quién aportó a la exposición estos ejemplares. Esperamos con impaciencia que se dé a conocer.

 

Se dio asimismo por terminada la Gymkana Micológica del Bernesga, en donde nos encontramos con un múltiple empate: Ningún (CERO) socio ha encontrado ninguno (CERO) de los muchos anagramas de la Asociación colocados en los puentes del rio Bernesga, a su paso por León. Al no estar previsto este resultado, queda suspendida la entrega de trofeos, así como la II Gymkana que, con los gastos pagados por San Jorge, se iba a celebrar en el rio Amazonas.

viernes, 25 de noviembre de 2022

Crónica de un micoviajero leonés (5ª etapa)

 


 

Y en saliendo de los hielos del Polo Sur, el micoviajero leonés vuelve a ponerse el bañador para terminar llegando a la Nueva Zelanda, exactamente a Te Upoko-o-te-Ikala (174º 46´38´´ Este) en la mismísima Isla Norte, en donde recolectó especies autóctonas, entre ellas la Amanita australis  y el  Entoloma hochstetteri . Aunque para comer recurría al Hangi maorí  y al  Asado Hogget. Y de ahí, vuelta a las aguas del Pacífico hasta alcanzar, medio extenuado las Islas Fiji, Tuvalu, Tahiti y el resto de la Polinesia francesa. Y aunque su interés es fundamentalmente la micología, el leonés no hace desprecio alguno de ningún otro arte y, ante la ausencia de setas, mete en el morral un original firmado por Gaugin, comprado en un mercadillo.

 

Y nadando en búsqueda de la Estrella Polar llega a las costas siberianas, unos grados más al este de Chucoka (172º 00’04´´ Este) y encantado de pisar tierra seca. Seca, pero fría hasta para un leonés de la Montaña. Y con poquita variedad  micológica, aunque con tanto abedular, fueron cientos los Lactarius y  Leccinum que el leonés se echó al morral.  Pero oye, que poco tardó en volver al agua. Y alcanza a poco y a nado el Polo Norte (90º 00´00´´ Norte y 0º 00´00´´mires donde mires). Nadie hasta entonces lo había conseguido. Allí plantó el pendón que llevaba en el morral flotando sobre la botella de Prieto Picudo totalmente vacía. Si por casualidad llegas al Polo Norte, tráelo para casa para exponerlo en el MUSAC. Un pequeño paso para el hombre, pero un gran paso para el Reino de León.

Puestas las cosas más fáciles, rumbo al Sur y cuesta abajo en el meridiano, el micoviajero leonés, deja a un lado las noruegas Islas de Jan Mayen (en donde no hay ni champiñones) para llegar al norte de Escocia. Y es ahí, después de miles de kilómetros, donde nuestro viajero se encuentra en su salsa. Aunque es primavera temprana, llega a ver especies reconocibles, incluidos algunos corros de San Jorge. Y además consigue convencer a los locales para sustituir en los mercados, el whisky escoces Blended y de 12 años, para introducir en su lugar el Orujo blanco berciano.

Pasa por Irlanda y, dejando la Bretaña francesa a su izquierda alcanza, con el agua al cuello, el Meyba, el morral y algo de chorizo incluidos, la costa de Asturias por Villaviciosa (5º 26`00`` Oeste) siendo recibido, como en su momento lo fue Carlos I, por toda la población, pero en este caso sin haberse perdido. Invitó, por supuesto a los asturianos a secarse en Coyanza, y pasando por el Puerto Ventana, como antes hiciera Jovellanos, atravesó de Luna a Omaña, visitando a Pablo Álvarez, que con el tiempo haría el camino inverso y arribó a casa, a la hora de cenar. Y esta vez sin comentario alguno. 


sábado, 19 de noviembre de 2022

Calocybe gambosa en arroz con leche


 


Ingredientes para el arroz con leche: 

1 litro de leche entera 

130 g de arroz redondo 

120 g de azucar 

15 a 20 g de Calocybe gambosa en polvo

300 cl. de agua 

Sal

Piel de limón. Rama de canela 

 

Calentar la leche con la piel del limón, la ramita de canela y el polvo de setas, cocer unos 5 minutos y reservar.

Poner a hervir el agua con la sal y cuando hierva añadir el arroz, remover y cocer hasta que se reduzca el agua. 

Añadir la leche al arroz y cocinar removiendo cada poco aproximadamente 40 minutos, esto depende el arroz y de lo cremoso que nos guste, tambien se puede poner algo más de leche si consideramos que es necesaria.

Cuando este cocido añadimos el azucar y removiendo cocemos unos 5 minutos más.

Enfriar el arroz. 

Servir con unas setas pequeñas enteras o troceadas fino, confitadas.

 

Para Confitar las setas: 

Hacer un jarabe con el doble de azucar que de agua y cocer 15 minutos las setas en ese jarabe, escurrir y utilizar

La receta es de Camirusula.

martes, 15 de noviembre de 2022

El Cuaderno de Campo de San Jorge






Con motivo de la XLVIII Semana Micológica de León, este año se ofreció a los conferenciantes, como detalle y recuerdo de su colaboración, una libreta de campo personalizada de cuero natural, cortada, repujada, tintada y trabajada a mano. Algunos socios, tuvimos la suerte de poder hacernos con alguna de estas libretas de campo, cuya utilidad es más como satisfacción propia y recuerdo de familia, que como una auténtica libreta de campo, que para eso están las Moleskine en cualquier tienda de barrio.

Por si resultara de interés, acercándose las fechas navideñas, dejamos algunas direcciones

www.ericaumbellata.com

@sencillamentecuero

info@ericaumbellata.com