...1975
Fue durante el mes de mayo cuando un grupo de amigos, aficionados al mundo de las setas, empezaron a madurar la idea de constituir una sociedad donde tuviesen cabida actividades cientificas, recreativas, deportivas y gastronómicas con el nexo comun de la micologia. Vaya por delante nuestro agradecimiento a este grupo de amigos, muchos de ellos de La Robla , otros de Leon..., que plantaron aquella primitiva semilla que lleva ya treinta y cuatro años germinando.
.....Y haciendo bueno aquel viejo refrán de que “la cera junto al santo...”,en septiembre de 1975, tras una primera Asamblea celebrada en el Aula Magna de la Facultad de Veterinaria de León, quedó constituida la AGRUPACION LEONESA DE BUSCADORES DE SETAS “SAN JORGE” de La Robla. Conviene recordar que fue en esta localidad donde tuvo su origen la Asociación de la que hoy nos sentimos orgullosos, una de las mas veteranas del suelo patrio, cuya fundación coincide en el tiempo con la de la Sociedad Micológica de Madrid y la S. M. de Barakaldo, entre otras, que comenzaron su andadura también en 1975.
En esta primera reunión se aprobaron los Estatutos de la sociedad -con el propósito de actualizar algunos de sus artículos en asambleas posteriores- y se nombró la primera Junta Directiva:
Presidente de Honor: EXCMO SR. D. MANUEL ALONSO CABEZA, .
Presidente: D. MANUEL ARENAS FERNANDEZ
Vicepresidente: D. ANGEL PESCADOR GALAN
Secretario: D. SANTIAGO AZURMENDI AZPIAZU
Vicesecretario: D. JOSE LUIS IRISO BERRUEZO
Tesorero: D. MAXIMO GONZALEZ GUTIERREZ
Contador: D. FELICIANO RODRIGUEZ MARTINEZ
Vocales. D. FERMIN SANCHEZ LOPEZ. D. LEONCIO MARTINEZ VAZQUEZ. D. JESUS MOTTA ROMO. D. MANUEL REBOLLOS ALVAREZ. D. OSCAR GARCIA PRIETO
Tras las lógicas y civilizadas discusiones relativas a los aspectos formales, es de destacar, por su interes y buen criterio, la propuesta formulada por uno de los asambleistas sobre la conveniencia de iniciar a los niños en las actividades de la Agrupación .......pues ellos han de ser los continuadores de la obra.
Ocurría todo esto en la tarde del 27 de septiembre, curiosamente el mismo dia en que tenían lugar los últimos fusilamientos de los condenados a muerte por el régimen del General Franco.
Todo era ilusión y compromiso de trabajo. Se convocó una asamblea de la Junta Directiva para el dia 21 de noviembre que tuvo que ser aplazada por haberse decretado luto nacional tras la muerte, ocurrida el dia anterior, de Francisco Franco Bahamonde.
Asi es que, pasados unos dias, el 5 de diciembre se reunieron los miembros de la Junta, esta vez en la sala de profesores de la Escuela Técnica Agrícola. Reunión que resultó ciertamente productiva, a tenor del número de temas que se trataron.
Antes de empezar a debatir el Orden del dia, como era preceptivo, se hizo constar en Acta el sentimiento de la Agrupación por la muerte del Caudillo, asi como su adhesión a D. Juan Carlos I, deseándole un feliz reinado. Concluidos los formalismos, se procedió a la lectura y aprobación del Acta de la sesión anterior; luego tomó posesion la Junta Directiva.
Se trataron asuntos como la conveniencia ó no de expedir un “carné de socio”; a este respecto alguno de los presentes apuntó la posibilidad de que poseer el referido carné podia resultar peligroso y hasta nefasto para la vida de la Agrupación (tengamos en cuenta el momento político y social que se vivia), con lo cual, acordaron posponer este tema y analizarlo en fechas posteriores.
Se estableció el plazo de un mes para que todos los interesados en formar parte de la Agrupación, facilitaran sus datos personales, fotografía....Y acordaron que todas aquellas personas que se adhirieran a la sociedad dentro del plazo señalado, serían consideradas “socios fundadores”.
Las cuotas correspondientes a los cuatro últimos meses del año 1975, se harían efectivas en una cuenta abierta en la Caja Rural Provincial (una muestra de agradecimiento hacia esta entidad porque había contribuido a sufragar los gastos de cuatro cursillos de Micologia que habían sido impartidos en años anteriores).
La cuota mensual que debían aportar los socios era de 25 pesetas.
Acordaron encomendar a uno de los fundadores de la sociedad, la labor de iniciar las gestiones pertinentes en la Diputación Provincial, a fin de conseguir un local social donde reunirse. En el supuesto de que por parte de este Organismo no se obtuviera una respuesta favorable, se haría necesario acudir a la Jefatura Local del Movimiento.
Ya en aquella primera Asamblea celebrada en septiembre, se había observado la necesidad de modificar parte del articulado de los Estatutos de la sociedad. Fue en este momento, dos meses mas tarde, cuando los cambios efectuados tomaron cuerpo y empezaron a tenerse en cuenta por parte de los asociados:
-El número de Vocales pasaría de cuatro a seis.
-Los socios de número que, durante dos años consecutivos, permanecieren en la sociedad, pasarían a gozar de los mismos derechos que los socios fundadores. (En un principio se había establecido el periodo de permanencia en cinco años)
-El pago de las cuotas no debería demorarse mas alla de cuatro meses.
-Las dos Asambleas anuales estipuladas, pasarían a celebrarse en los meses de abril y octubre, en lugar de junio y enero.
-El presupuesto inicial sería de menos (bastante menos.....) de 100.000 pesetas.
-La sociedad estaría radicada en León y no en La Robla.
Se vivía un momento de cambio en el plano político; la sociedad experimentaba un cierto sentimiento de incertidumbre, pero sobre todo de esperanza. En estos días había tomado posesión de su cargo D. Torcuato Fernández Miranda (Presidente de las Cortes y del Consejo del Reino). Salían de la cárcel los primeros presos políticos, beneficiarios del indulto general con motivo del inicio de la Monarquia Constitucional. Entorno a estas fechas se publicaba una Orden Ministerial para modificar la nomenclatura de las autopistas nacionales. Empezaba una nueva etapa en la vida de los españoles.
El grupo fundador de la Sociedad mantenía la ilusión, el espíritu de trabajo, la constancia.........
Y así..... el 5 de diciembre de 1975, cuando se asomaba el invierno en el horizonte leonés, comenzó su andadura la SOCIEDAD MICOLOGICA SAN JORGE como tal; fue precisamente ese dia cuando los socios fundadores, reunidos, acordaron la nueva denominación y el distintivo que siempre la acompañaría (la figura de un
tricholoma georgii).
Raquel Alvarez Alvarez