MICOMICRORELATOS 10ª Entrega

Como ya se había comentado y dado que resulta imposible publicar todos los relatos recibidos sin resultar monotemáticos, este grupo de contribuyentes ha decidido, democráticamente, elegir para esta entrega los que figuran a continuación. Y eso se irá haciendo en otras ocasiones. Insistimos que para concurso, entrarán todos los microrrelatos recibidos.


Por otro lado el día de San Jorge, que siempre cae el 23 de Abril, este año es sábado y además, sábado santo. Y como somos cristianos, católicos, apostólicos y leoneses (aunque nada es imprescindible, ni el orden el establecido) y no queremos interferir en la celebración semanasantera con una fiesta pagana, que ya tenemos suficiente con el Genarin, creo que en la Asociación Micológica optarán por retrasar la celebración y, con ello, la entrega del premio al ganador de este Primer Certamen de mico micro relatos de San Jorge. Que lo vayan Vds. sabiendo.

10 del 10 del 10

Título: EL CÍRCULO



Un día encontró a otra persona sentada dentro del corro mágico del prado. Una cesta descansaba posada en la hierba .Despacio se acercó y entablaron conversación bajo el dulce sol otoñal. Coincidían en muchas ideas, amaban las mismas cosas. Día tras día, poco a poco, el grupo fue creciendo. Compartían tanto que del círculo de carne y hueso surgió la magia de la amistad y aunque el corro de brujas solo asomaba una vez al año, el otro perduró, como un micelio profundo y antiguo a salvo de talas , rastrillos e incendios. Y juraron protegerlo.

Autor: GINEBRA AZUL





Título: AMANITA MUSCARIA

Sentada sobre aquella roca que oteaba mis andanzas infantiles, recordando con apacible nostalgia, reconstruyendo viejos escenarios, la calma invade mi espíritu hasta tal punto que no se si duermo.

Cierro los ojos y veo aquella vieja pastora encorvada que, enérgica, me recrimina: ¡No toques! ¡Es veneno!

Las vacas saciadas y tranquilas, rumian……..ajenas a los recuerdos.

Autor: APRILE





Título: EL BOSQUE ILÓGICO



De repente, desperté algo aturdido. El bosque ya no parecía el mismo. Oí un grito sordo. Me giré. Mi coche se afanaba por imitar el canto de un búho con ojos de lince. Mientras, oculto entre árboles y matorrales, un chimpancé doctorado en antropología anotaba en su libreta los aspectos más relevantes de mi comportamiento de humano. Tiré la mirada al suelo: las setas trepaban por mis piernas. Algo golpeo mi cara. Abrí los ojos. Extasiado, mi hijo repetía una y otra vez: ¡Vuelve en ti, vuelve en ti! ¡No debiste probarla!

Autor: JOE BLACK