Cuando en abril del año 2019 se publicó en archivosdemicologia el post de “El libro recomendado por…” en referencia a “LA VIDA SECRETA DE LOS ÁRBOLES” de Peter Wohlleben, donde suponíamos que las setas se comunicaban entre si, y que esa era la causa por la que se “escondían” a nuestro paso por el bosque, está actualmente pseudoconfirmado con el artículo publicado hace unos meses por Andrew Adamatzky (Director del Laboratorio de Computación no convencional de la Universidad de Bristol) en la revista de la Royal Society Open Science, que con el título Language of fungi derived from their electrical spiking activity (Lenguaje de hongos derivado de su actividad de picos eléctricos) nos demuestra la comunicación que a través de sus micelios y con un léxico propio de hasta 50 palabras, entablan entre si, diferentes especies fúngicas.
Los aficionados
tenemos que entender, pues, las razones por las cuales son muchos los días que
no vemos una seta por el bosque. Y que las que encontramos, posiblemente sean
sordas. Y como confirmación a esta hipótesis, basta con cantar bajo el sombrero de cualquiera de las que encontreís el "porompompero". Por mucho electrodos que se añadan, ni se inmutan.
Son múltiples las
webs que se hacen eco de ello, aunque solo San Jorge, tiene experiencia
manifiesta de todo. Se recomienda buscar esas páginas para informarse.
Referencia: Andrew Adamatzky. 2022. Language of fungi derived from their electrical spiking activity. Royal Society Open Science 9 (4): 211926; doi: 10.1098/rsos.211926
speaking
ResponderEliminarResearch articles
ResponderEliminarLanguage of fungi derived from their electrical spiking activity
Andrew Adamatzky
Published:06 April 2022https://doi.org/10.1098/rsos.211926