10 del
10 del 13
La mayor parte de los microrrelatos que nos llegan, no
hacen mención
expresa a una especie determinada. Se habla genéricamente de diferentes tipos
de boletos, amanitas, champiñones… lo cual permite al aficionado la doble lectura que puede
dar el poner apellido al individuo micológico
mencionado en el relato.
A continuación van los mico micro relatos elegidos para esta 4ª
entrega. La próxima,
que llegará con
la primavera, será la última
de este IV Certamen y los mejor valorados a juicio de los componentes del blog
van a ser los que el jurado evalúe. El hecho que no figuren entre los publicados en
<archivosdemicologia.blogspot.com> en alguna de sus entregas, no
significa que el resto del jurado tenga la misma opinión.
Recuerdos
En el
pueblo, todos sabían que aquel camino y aquella
campera junto a la vieja tapia, daba muchas setas de cardo, pero ellos
respetaban el lugar y nunca lo andaban, solo los forasteros paraban sus coches
cerca y llenaban la cesta sin preguntarse la razón por la que los vecinos allí no buscaban, y año tras año, nadie se atrevía a contarles la triste
historia de la cuneta de aquel camino y de las viejas señales de antiguos impactos en el tapial de la pared.
Federico.
Cena de gala en el
salón imperial
Se miraban a los ojos con gran expectación, como queriendo
adivinar en ellos un secreto que, en realidad, ninguno conocía. El olor a
comida impregnaba el salón, dejando un hálito de nerviosismo y pavor. La señora
Villadehesa fue la primera en levantar el tenedor y pinchar el cuerpo carnoso
del boletus. Poco a poco,
el resto de comensales la siguieron, metiendo pedazos de seta en sus ávidas
bocas. Pero, tras el sorbo de tinto que precedía al tercer bocado, el tenedor
del doctor Villadehesa resbaló de sus dedos y cayó, dejando tras de sí doce
vencedores y una rica heredera.
Creira
Reencuentro
Nada más llegar, lo primero que hizo fue preguntar dónde estaban los bosques y las praderas celestiales.
- Allá, detrás de aquellos cúmulos del horizonte- le contestaron.
Al
acercarse lo encontró como siempre le había recordado, caminando despacio, mirando fijamente al
suelo, con su sombrero y su cesta de mimbre en la mano, parecía un poco desganado y sin setas.
Presintiendo
su llegada, él, levantó la cabeza y sin sorpresa la
dijo.
-Por fin
has venido, cuanto te he echado de menos-
Ojalá
Información de interés:
Desde archivosdemicología consideramos que el trabajo creativo de los aficionados a la literatura micológica bien merecería ser conocido por todos. Por ello, mensualmente iremos colgando en el enlace abajo indicado, la mayor parte de los micomicrorelatos recibidos que por falta de espacio, y por no sobrecargar al personal, no han podido ser publicados en este blog.
Desde archivosdemicología consideramos que el trabajo creativo de los aficionados a la literatura micológica bien merecería ser conocido por todos. Por ello, mensualmente iremos colgando en el enlace abajo indicado, la mayor parte de los micomicrorelatos recibidos que por falta de espacio, y por no sobrecargar al personal, no han podido ser publicados en este blog.
Qué bonito, relatitos como setas o callampas. Tendríais que hacer una clasificación mico lógica de sus caracteres. Seguro que los hay más o menos nutritivos, más o menos difíciles de cocinar y hasta venenosos.
ResponderEliminarEnhorabuena.
Universidad de Micología Psicológica.